¿Desde dónde te estas relacionando cuando comienzas a vincularte con un otro? Esta claro que tod@s queremos amar y ser amadas de vuelta. ¿Pero porque a veces parece misión imposible? Comencemos por el principio, chica conoce a chico, o chica conoce a chica… A partir de ese momento ya se comienzan a activar nuestros mecanismos inconscientes, ¿que significa esto? Que no estamos neutrales en la búsqueda, encuentro del amor... A menudo recibo muchas consultas diciéndome o preguntándome porque siempre les pasa lo mismo, que la otra persona no me corresponde, no me devuelve los mensajes, me abandona, no me trata bien, ect… Por eso planteo la pregunta al principio, ¿amas o dependes? Nos relacionamos desde la carencia, que necesitamos de un otro para que nos de lo que nosotras creemos necesitar, pero eso nos coloca en un lugar de carencia brutal. Nadie nos hace nada, nosotras siempre entregamos ese poder previamente. ¿Pero porque creemos necesitar eso que teóricamente nos falta? Aquí te planteo ¿que concepto tienes del amor? ¿es fácil, es díficil, en tu fantasia es un cuento de hadas? El concepto del amor se basa en cómo recibimos  y percibimos el amor en nuestra infancia. Esa es una clave, porque si para tí el amor fue control, de alguna manera estarás atrayendo relaciones con personas controladoras, o crearas una estrategia para no comprometerte, personas no disponibles, o relaciones en las que acabas huyendo, ect. Cada persona llevamos un mapa, y ese mapa afecta a cómo entendemos el amor, y creemos que cuando encontremos el amor nos amaran del modo que nosotras entendemos como amor, y allí es cuando viene el apego, el sufrimiento, dependencia. En la búsqueda del grial, estamos dispuestas a todo, desvalorizandonos muchas veces y aceptando cosas inaceptables. Si hay una carencia, hay que reconocerla, y trabajarla. Porque pensar que encontraremos el amor de nuestra vida y comeremos perdices y viviremos felices es algo creado por Disney. Seamos realistas somos espejos, y las relaciones de pareja han venido a enseñarnos y mostrarnos nuestras heridas, y cómo madurar haciendonos cargo de nosotras mismas y no dejando la responsabilidad fuera… Así que tomemos el control de nuestras relaciones amorosas, revisando desde dónde nos relacionamos, cuál fue el modelo de amor que recibimos y desde ahí como entendemos el amor, y demos el primer paso en la tarea de amarnos primero nosotras para relacionarnos desde el amor y no desde la carencia que hay un otro que nos tiene que proporcionar. El sentirnos completas y desde ese lugar compartir, sin depender de que obtener el amor siempre venga de fuera.